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Recordando la trilogía Donkey Kong Country

La época dorada del mono más conocido de los videojuegos.

Los cambios reales aparecen en el mundo y en las diferentes cosas que se pueden hacer ahora. Este juego se desarrolla en el Kremisferio Norte, una zona con diversas localizaciones e islas por las que nos moveremos en un completo mapa. Esta vez el acceso a los mundos no es lineal, ya que usando diferentes medios de transporte podremos ir moviéndonos por el mapeado para acceder a ellos y a cuevas secretas que haya por toda la zona, algo que permite que en ciertas ocasiones no tengamos que seguir un cierto orden para completar las fases. De nuevo hay en total cuarenta y siete niveles a lo largo de ocho mundos.

Aparecen coleccionables que se obtienen fuera de las fases tradicionales, los Banana Birds, seres extraños encerrados en cuevas en las que tendremos que superar un minijuego de repetición para liberarlos, y que nos darán acceso al verdadero final del juego. Alguno de ellos estará en una jaula en casa de un oso y tendremos que conseguirlo a cambio de un objeto. Aquí otra novedad, cual aventura gráfica tenemos que ir intercambiando objetos con los diferentes osos del juego para poder conseguir más pájaros. Aunque algunos osos también nos brindan acceso a otras áreas inaccesibles, siendo uno de ellos el que, a cambio de monedas Boomer (sustitutas de las Kremkoins) nos abrirá las distintas fases del mundo secreto.

Recordando la trilogía Donkey Kong Country

Algunos de esos osos nos pedirán monedas oso, las que ahora aparecen en lugar de las plataneras y que también serán las que nos pida Swanky para los minijuegos que tiene junto a Cranky. Las otras monedas, las DK, están protegidas por enemigos a los que deberemos derrotar completando sencillos puzles que provoquen que reciba un barrilazo en su espalda.

De nuevo las localizaciones vuelven a ser maravillosas y variadas, y con la mejora gráfica se pueden crear nuevas sensaciones, como la de escalar un árbol gigante mientras una sierra va subiendo para cortarlo. Además ahora hay situaciones en las que la vista de la cámara se coloca detrás de nuestros personajes para batallas y minijuegos, de manera que se consigue lograr aún más el 3D que se pretende simular.

Recordando la trilogía Donkey Kong Country

De nuevo, la exploración y la recolección serán premiadas con el acceso a los tres finales posibles que hay (siendo continuación uno de otro). Hay veces también en las que el mapa sufrirá cambios según cómo completemos un nivel o por los tratos que hagamos con los osos, por lo que el universo en el que nos movemos libremente y sus modificaciones son una novedad bastante importante.