Conduit 2
Drudges, fuego y plomo para el regreso del agente Michael Ford en un título técnicamente brillante que lleva el multijugador un pasito más allá en nuestras Wiis.
Conduit 2 - Análisis
Se ha hecho de rogar, pero al final lo tenemos con nosotros. La continuación del título que estaba llamado a convertiste en el buque insignia del inexplorado potencial gráfico de Wii llega a nuestras consolas con la intención de corregir los errores de la primera parte y de convertirse, esta vez sí, en el referente multijugador en la consola dentro del género de los first person shooters.
Para muchos estas metas habrán sido alcanzadas con creces, mientras que para otros los chicos de High Voltage habrán vuelto a fracasar en su gesta por hacer un aporte único y con propia personalidad para la sobremesa de Nintendo. De todas formas, no puede negarse su intención de ofrecerlo más allá de las típicas declaraciones que hacen todos los estudios. El buen hacer y la voluntad están ahí, pueden verse en cualquier parte del juego, ya sea en los nuevos entornos que sacan todo al partido al motor gráfico propio el estudio, el Quantium 3, con reflejos por doquier sobre texturas en la mayor definición vista hasta ahora en Wii; o bien en los variados y renovados modos multijugador, en los que sacar partido a las nuevas armas, siendo algunas de ellas todo un ejercicio de originalidad.
Pero vayamos por partes, veamos en las siguientes líneas por qué Conduit 2 (esta vez sin el “The” delante) ha levantado tantas críticas, y por qué sin embargo es un juego muy a tener en cuenta.
Modo Campaña
Comencemos por su campaña principal.Volvemos a estar en la piel de Michael Ford, el único miembro del servicio secreto del presidente de los Estados Unidos que una vez le salvara la vida. Nos encontramos delante de un conducto dimensional que nos llevará tras los pasos de John Adams, comandante líder de La Fundación, una antigua organización que vela por la seguridad de los USA a través de tecnologías secretas, muy poderosas, de origen desconocido.
Hemos descubierto que John Adams es el responsable de que una raza alienígena denominada drudges haya realizado una invasión a escala mundial en el planeta Tierra. Estos alienígenas son el resultado de unos experimentos genéticos con muestras de Prometheus, un alienígena que en su momento estuvo trabajando para La Fundación bajo la apariencia de un científico, hasta que robó una de sus más valiosas tecnologías, el EVA, un dispositivo que, desde un nivel práctico, nos permite recibir todo tipo de información de nuestro entorno, así como desbloquear puertas o encontrar artefactos ocultos. Prometheus ahora nos habla a través del EVA, y nos guía en esta persecución final tras Adams, en un viaje que nos llevará a diferentes puntos del planeta en los cuales iremos descubriendo hasta dónde llegan realmente los tentáculos de Adams.
Habiendo hecho esta pequeña introducción de la trama para que los noveles en esta incipiente saga se queden un poco por dónde van los tiros en Conduit 2 (y nunca mejor dicho), pasemos a comentar los cambios más notables en su desarrollo, intentando no desvelar demasiado de la historia que, todo sea dicho, no tiene una importancia tan relevante como pudiera tener en otros títulos.