Wario Ware: Smooth Moves

Wario Ware: Smooth Moves - Análisis

It’s a Wii!! Waaario!
No podía ser más personal. Con esa frase se presenta Wario en su último éxito para Wii, sin dejar pasar la oportunidad de cachondearse de las frasecitas del opuesto fontanero bigotudo.
Hace cuatro años, Nintendo escogió a su personaje más irónico, gamberro y guarrete (y quizás menos explotado) para crear un concepto de juego que encajara con sus formas. Goro Abe, miembro del R&D1 de Nintendo, se sacó de la manga la fórmula perfecta: los microjuegos. En ellos, y con el básico control de Game Boy Advance, una serie de pruebas de escasos segundos se sucedían en pantalla, proponiendo siempre una sencilla -pero rápida y oportuna- actuación por parte del jugador; la velocidad y dificultad de las pruebas era el único límite. En la obra original, Wario pretendía sacar pasta vendiendo ese paquete de juegos, mientras que nuevos personajes creados para la ocasión ofrecían otros conjuntos de microjuegos basados en temáticas, sumando hasta 200. Rodeado de un ambiente retro, a veces surrealista y otras completamente absurdo, el conjunto se llamó Wario Ware: Minigame Mania y fue un ejemplo de frescura en la industria. Y un título enormemente divertido y adictivo.

Wario ya lleva la "manita". ¿Sabrías cuál es cuál?

En estos cuatro años, la saga ha evolucionado paralelamente a las tecnologías de control que implementaba Nintendo, quizás de formas más cercana que cualquier otra. Tras la única adaptación a la sobremesa -versión del original llevada con modos multijugador a GameCube-, en 2005 Wario volvía por partida doble: estrenando todas (todas) las funciones de Nintendo DS en Touched! y coqueteando con las sensaciones que hoy ofrece Wii en GBA: acompañado de un giroscopio especial y de un motor de vibración único en la versión Twisted! (considerada la mejor hasta la fecha, y lamentablemente sin edición europea).

El nuevo Smooth Moves, como la versión GameCube, ha sido co-desarrollado por Intelligent Systems (Paper Mario, Fire Emblem…). Su llegada a Wii se consideraba obvia desde que se conoció el nuevo método de control, y era sabido su futuro carácter demostrativo, como hizo Touched!. Probablemente por ello, todos esperábamos un lanzamiento a la par con el sistema, pero quizás para evitar comparaciones o competencias con títulos que podrían parecer del mismo corte, Nintendo le ha regalado a Wario su lanzamiento estrella de este primer mes de 2007, a la venta desde hoy en Europa y en 3 días en EEUU.

Move it!
Wario Ware: Smooth Moves presenta una característica claramente diferenciadora. Como ofrece más de 20 posturas de control, se optó por mostrar al jugador la indicada para manejar cada microjuego justo antes de que comience. Un dibujo con el nombre de la postura hará esta función. En el amplísimo abanico de gestos, se utilizan con inteligencia todas y cada una de las funciones del mando de Wii: apunta con una o dos manos (o encima de la cabeza, o en la nariz), agita cual maraca, inclina desde distintas posiciones (apuntando, a modo de volante o de manillar, como una espada, sobre la palma…) o combinaciones de entre todas ellas. Precisamente, y de modo similar a la versión de Nintendo DS, la “gracia” de este Wario reside principalmente en ese cambio rápido de posturas. Sin duda, es una versión (deliberadamente) mucho más física, propiciando un espectáculo digno de observar, aunque no se juegue.