Portada » Análisis » Call of Duty: Black Ops

Call of Duty: Black Ops

La franquicia estrella de Activision llega con retraso a Wii con una entrega más grande en todos los aspectos respecto a sus predecesoras. Con el nuevo conflicto, llegan nuevas formas de contar una historia y nuevas formas de jugarla.

Call of Duty: Black Ops - Análisis

“Sabe por qué está aquí”  A todas las novedades hay que incluirle por fin el chat por voz, que funciona notablemente, y con el cuál tendremos la posibilidad de escoger a quién queremos oír y a quién no. Además, todos los menús han sido mejorados, ofreciendo ahora todo tipo de información sobre todos los jugadores que han estado en nuestra partida, o los que están alojados en la misma sala que nosotros. También se ha agilizado el sistema de añadir aliados, pudiendo ahora enviar invitaciones a los jugadores que hayan compartido recientemente enfrentamientos con nuestro personaje. No obstante, también encontramos errores dentro del multijugador, como la lentitud en ocasiones para encontrar partidas, lo frecuente que es encontrar los servidores llenos, que una partida se termine si el host se desconecta, o que inexplicablemente el modo todos contra todos sólo admita a ocho jugadores cuando en otros modos de juego se permiten hasta diez. De todas formas, todos los que disfrutaran del online de Reflex no deberían tener ningún problema con el multijugador, sino al contrario. Las nuevas inclusiones dan más variedad a un modo de juego que, por su propia naturaleza, es casi infinito.

La nitidez de los recuerdos

“Sé cuando miente” Parece que en este Black Ops para Wii la gente de Treyarch ha aceptado el hecho de que la plataforma de Nintendo tiene sus limitaciones y que hay cosas que no pueden disimularse si se quiere ofrecer una gran cantidad de elementos en pantalla. Black Ops tiene misiones que a nivel técnico se encuentran muy por delante de cualquier cosa vista en Modern Warfare Reflex, pero también cuenta con escenarios que lucen peor inclusive que en World at War, salido ya hace casi tres años. No obstante, ninguna llega a los niveles que se han podido ver, por ejemplo, en Goldeneye 007 con el nivel de Severnaya. Encontraremos demasiadas texturas planas o elementos que parecen flotar en el escenario. En algunos niveles encontraremos una gran cantidad de edificios ricamente detallados, con enemigos por doquier, con una aceptable distancia de horizonte, explosiones, y efectos climatológicos y todo corriendo a una tasa estable de imágenes por segundo; y en otros encontraremos escenarios demasiado angulosos, texturas que tardan en cargarse, popping y fondos de pantalla horrendos a resoluciones ínfimas, y corriendo por debajo de los 25 frames por segundo, llegando a niveles totalmente inaceptables. ¿Todo esto qué significa? Que Black Ops es un juego, a nivel técnico, terriblemente irregular.

Call of Duty Black Ops Wii Análisis

“¿Por qué confió en él?” Y pese a todo, a nivel general se puede decir que es un juego técnicamente sobresaliente, debido principalmente a los pequeños detalles que hacen que la experiencia al final sea satisfactoria. Desde la mejora sustancial de los modelados de los enemigos y personajes principales, a la de los efectos climatológicos, de partículas y humo, así como una recreación del agua mucho más realista. Además, los escenarios estarán plagados de pequeños elementos móviles, que volarán por los aires cuando haya una explosión o un intercambio de balas entre diferentes bandos. Relojes que se caen de las paredes, hojas esparcidas por el suelo que salen volando, libros o ladrillos. En general, los interiores están mucho más completos, y los exteriores son más ricos, si bien como se ha dicho no luzcan en ocasiones todo lo bien que deberían.