Trine 2: Director's Cut
Plataformas y puzles basados en físicas con gráficos bellos.
Impresiones - Trine 2: Director's Cut - Avances
Uno de los primeros juegos descargables de Wii U será Trine 2: Director's Cut, del estudio finlandés Frozenbite. Es un juego de plataformas y puzles con jugabilidad 2D pero gráficos completamente 3D en el que hay que combinar las habilidades de los tres personajes disponibles para poder avanzar. Todo con un diseño de niveles centrado en el uso de físicas.
Como ya está a la venta en otras plataformas, para ofrecer algo diferente le han metido contenido realmente nuevo. Se puede resumir en que este Trine 2: Director's Cut trae cinco pantallas y un jefe final más, pero también enemigos nuevos, todo en una ambientación añadida.
La base es muy sencilla y además se ha adaptado totalmente al mando de Wii U. En cada pantalla hay que llegar al final solucionando los puzles o acabando con los enemigos, y para conseguirlo hay que recurrir a alguna de las capacidades de un personaje determinado en cada caso. Hay un mago capaz de crear cajas de la nada y de moverlas por el aire sin que las afecte la gravedad. Un guerrero, con potentes dotes de lucha. Y una arquera que además de disparar flechas tiene un gancho para colgarse de superficies elevadas. Para cambiar de uno a otro tan solo hay que pulsar el gatillo izquierdo y se hace automáticamente, sin olvidar que este juego contará con multijugador, aunque de momento no pudimos verlo.
Probando una pantalla exclusiva de Wii U
Precisamente para enseñar algo distinto el equipo se ha traído al E3 una demo con una de las pantallas nuevas, que es justo la que pudimos probar. Es una pantalla ambientada en una especie de mundo de arena, con ruinas que bien recuerdan a las zonas del sur del Mediterráneo. El escenario, como todos sus gráficos, es impresionante. Lo es por su factura técnica y también por la artística. En cuanto ves Trine 2: Director's Cut, aprecias el enorme trabajo que hay detrás y lo pulido que está.
El escenario da una sensación de realismo sobre todo gracias a una iluminación muy cálida, al contrario que los personajes. Está repleto de detalles que no dejan ni un segundo sensación de vacío, y aun así no recurre a la repetición de elementos en pantalla. Mientras que en la tele parece correr sin ningún problema y con suavidad al máximo nivel, en la pantalla del mando no pierde nada y mantiene la nitidez y la sensación de definición. Lo que pasa es que por ese estilo puzle la cámara está bastante lejos y en una pantalla de seis pulgadas queda algo pequeño.