Portada » Análisis » Rhythm Thief y el Misterio del Emperador

Rhythm Thief y el misterio del emperador

El ladrón que le devuelve el ritmo perdido a SEGA.

Rhythm Thief y el Misterio del Emperador - Análisis

Dreamcast tuvo una defunción prematura, es bien cierto, pero eso no le impidió a sus usuarios el disfrutar de grandes títulos, entre los que encontraban algunas apuestas musicales como Space Channel 5 o Samba de Amigo. Dos juegos bien distintos pero con un mismo denominador común: el ritmo.

Ahora ese ritmo lo hace suyo Rhythm Thief y el Misterio del Emperador en un juego que precisamente cuenta con la experiencia del productor y director Shun Nakamura, responsable del título de Amigo, y con las ganas de ofrecerle a los jugadores un juego musical con el que poder empatizar con los personajes gracias a su historia, del mismo modo que en su día lo lograra el juego de Ulala. Veamos si lo han logrado.

Porque detrás de un juego musical sí puede haber una buena historia

Cuando uno se para a pensar en anteriores juegos musicales o rítmicos, sean para la plataforma que sean, lo normal es acordarse de aquellos en los que simplemente hay que pulsar los botones (o mover el mando) en el momento indicado con tal de seguir el ritmo. Y así sucesivamente canción tras canción, nivel tras nivel. Pero con Rhythm Thiefeso pasa a un segundo plano.

Análisis Rhythm Thief 3DS

En él se narran las aventuras de un joven llamado Raphael y su inseparable perro Fondue. Un chico aparentemente normal salvo por un pequeño detalle: su álter ego Phantom R. Un ladrón que devuelve todo lo que roba y que sólo se apropia de aquellos objetos que contienen una misteriosa marca, un símbolo que guarda relación con la desaparición de su padre.

Una noche, tras hacerse con un brazalete expuesto en el museo del Louvre y escapar de la policía, se encuentra de forma casual con la joven Marie y un grupo de misteriosos caballeros, liderados por el mismísimo emperador Napoleón, que la está persiguiendo. Ambos, junto a Fondue, consiguen escapar e inician así una aventura llena de misterios.

Sin grandes alardes, ni florituras y sin la necesidad de grandes giros argumentales, la historia de Phantom R pese a que podría pasar como la típica de una serie de animación nipona, es lo suficientemente buena y atractiva como para invitarte a seguir jugando y avanzando hasta el final. Y uno de los motivos que ayudan a que así sea son susnumerosas escenas animadas en tres dimensiones, las cuales gozan de una gran calidad y le dan ese mayor énfasis a los momentos más trascendentales del juego.