Project Zero 2 Wii Edition
Terror japonés en estado puro
Project Zero 2 Wii Edition - Análisis
Este ha sido uno de los peores análisis que he tenido que hacer nunca. Y no es porque el juego sea malo, todo lo contrario, sino porque cumple perfectamente con su objetivo: que pases miedo.
Yo nunca me he sentido impresionado por el concepto de terror occidental, el de la casquería, gritos y sangre por todas partes. Sin embargo, el terror de lo oculto, el ruido en la oscuridad, el susurro reptante en medio de la noche… El temor a lo desconocido tiene mucha más fuerza. Tal vez Project Zero 2 no hace que estés todo el tiempo dando botes en el asiento con golpes de efecto, pero sí consigue que el jugador permanezca en un estado de tensión continua a lo largo de toda la partida, expectante. Es simplemente agotador. Y divertido.
Rehacer un clásico
Porque esto es lo que es Project Zero 2: un clásico. Un juego de terror que salió hace ya muchos años justo cuando el género del survival comenzaba su declive. Silent Hill perdía fuelle, Resident Evil se pasaba a la acción... Project Zero recuperaba la esencia del género y le daba una vuelta de tuerca.
Esta nueva versión para Wii es eso, nueva. Escenarios rediseñados, gráficos mejorados, sistema de combate (por llamarlo de alguna forma) pulido y nuevos modos de juego, que convierten a Project Zero 2 Wii Edition en el primer survival con posibilidad de generar mansiones encantadas aleatorias con multijugador.
La genialidad de Project Zero 2 Wii Edition es que no es el juego el que se adapta al jugador. Eres tú el que tiene que dejarse llevar por los ritmos que te impone él. Lo bueno del asunto es que esto no ocurre nunca, ya que se nos desvela con un control deliberadamente lento, pausado, que se recrea hasta cuando vamos a coger un objeto del escenario. Andar por un pasillo es demoledor, ya que si decidimos andar vamos a paso de tortuga y, si corremos, igualamos la velocidad de un perezoso yendo cuesta arriba. La cámara, siempre a nuestra espalda, se mueve gracias al wiimote y es deliberadamente pesada.
