Mario & Sonic en los Juegos Olímpicos

Mario & Sonic en los Juegos Olímpicos - Análisis

Otra posibilidad de juego son las misiones. El juego nos propone superar unos cuantos retos con cada uno de los personajes. Pero no siempre será hacerlo lo mejor posible y quedar campeón, como en el resto de pruebas, sino que será más necesario afinar con el esfuerzo para, por ejemplo, llegar en una carrera de 100 metros en una franja de cinco segundos, o lanzar el martillo entre una distancia concreta y no el máximo que podamos. Es refrescante porque permite jugar brevemente, y porque enseña que el éxito no es siempre batir el Record Olímpico.

A estos modos de juego hay que sumarle los que se nos presentan en la Galería, aquí podremos ampliar nuestros conocimientos sobre los juegos olímpicos de la era moderna o de la antigüedad, o sobre los próximos JJ.OO de Beijin o curiosidades varias. Para ello tendremos que superar una serie de retos que nos desbloquearán información. Se trata de juegos al más puro estilo arcade donde tendremos que repetir una secuencia de voz, aplastar con un martillo, encontrar la carta diferente, contar de forma rápida o inclinar el mando para repartir bolas de un color a un lado u otro.

No todo es tan bonito como pueda parecer y de aquí en adelante veremos porqué. Mario y Sonic en los Juegos Olímpico es un juego marcado por la controversia. Empecemos por el control.

El manejo del juego se hacer por norma general con el Wiimote, aunque en algunos casos se requiera el Nunchuk o simplemente se aconseje su uso por comodidad. El uso que se hace del mando de Wii es amplio y diverso, tendremos que sacudirlo, girarlo, apuntar, mover los controles de forma alternada, apretar una secuencia de botones en el orden correcto, etc. Pero aunque se saque jugo a las posibilidades del peculiar mando de la consola, no está tan bien resuelto como ya vimos en Wii Sports; un título que, si bien era sencillo, marcó una cota de calidad en lo que a control se refiere. En esta ocasión la respuesta a nuestras acciones no se ve reflejada de forma precisa en la pantalla; no es que sea una cosa exagerada pero a veces eso nos privara de conseguir una buena marca, provocará que fallemos sin tener culpa o nos cansará antes de lograr nuestro objetivo. Otro aspecto a tener en cuenta es que el control se sitúa en ese punto que lo hace algo inaccesible a los nuevos jugadores y a la vez supone un reto menor para jugadores mas avezados. Aun así hay pruebas con las que sudaremos (literalmente) la gota gorda y otras con las que podremos disfrutar viendo jugara nuestra madre o nuestra tía (por experiencia). El cambio entre unas pruebas y otras es, en ocasiones, demasiado brusco. La dificultad que encierran algunas pruebas es desmesurada y su control exigente, comparándolas con las que hayamos podido jugar justo antes. Esto confunde al jugador y le impide progresar de un modo coherente. En las primeras tomas de contacto nos atascaremos con facilidad ante la dificultad de realizar bien un ejercicio, cosa que provocará frustración y ganas de dejar de jugar en algunos momentos. Por suerte lo que importa es que al final del circuito quedemos primeros, de modo que podemos permitirnos alguna prueba mala si mantenemos una buena media. En este sentido hay q saber que pruebas se nos dan mejor ya que en la partida se nos permite hacer una apuesta. Si aceptamos el desafío en una prueba y logramos alcanzar una de las 3 primeras posiciones, obtendremos bonificiación extra.

Si bien la respuesta a nuestras ordenes es lenta, hay otras pegas que objetarle al juego en este sentido. Pese a lo bueno de tener a disposición modalidades y deportes muy diversos, el control no está excesivamente logrado en muchos de ellos. Acabaremos por darnos cuenta que muchas de las pruebas requieren un control demasiado parecido o con pocas variaciones, esto achaca al juego una cierta monotonía. No obstante hay pruebas con un control muy cuidado, un claro ejemplo es el Tiro con arco, una de las más conseguidas con diferencia. Además hay deportes que no convencen y dejan un sabor de boca algo amargo, dando la sensación de estar de relleno. Con un par de partidas en cada categoría perfilaremos nuestras pruebas preferidas y otras en cambio las dejaremos de lado jugándolas muy puntualmente.