Dead Rising: Terror en el Hipermercado (Chop Till You Drop)
Frank West conoce a Leon S. Kennedy.
Dead Rising: Terror en el Hipermercado - Análisis
El juego fue pensado originalmente como un sandbox en el que el jugador podía elegir en qué gastar sus tres días, sin embargo, en la versión para Wii esto cambia totalmente. Terror en el Hipermercado es completamente lineal, y para avanzar en el tiempo deberemos cumplir una serie de misiones preestablecidas o no pasará nada nuevo. Casi todo el juego consiste en rescatar supervivientes, derrotar a algún psicópata y resolver parte del misterio. Siempre en ese orden. Desgraciadamente, las misiones de rescate son tan monótonas y repetitivas que terminarán aburriendo. Esto es culpa de que tendremos que atravesar mil veces los mismos pasillos, matar mil veces al mismo zombie que siempre está en el mismo sitio y, por si fuera poco, con total ausencia de reto. Porque una de las mayores diferencias entre Dead Rising para Wii y el de Xbox 360 es el nivel de dificultad. El juego es condenadamente fácil. Podremos avanzar por la mayor parte del centro comercial sencillamente esquivando a los zombies, y si nos tenemos que enfrentar a ellos, la superioridad que nos dan las nuevas armas es aplastante. Esto se acentúa en los duelos contra los psicópatas, antaño temidas fieras. Casi ninguno supondrá un problema para un jugador medianamente habilidoso. Desde aquí recomiendo a todo aquél que haya jugado al Dead Rising original o a Resident Evil 4 que lo empiece directamente en difícil si quiere que el juego le dure algo.
En un intento de evitar que nos sea demasiado sencillo eludir las paupérrimas hordas zombie, durante el proceso de diseño han ideado una forma bastante peculiar de ponérselo complicado al jugador: eliminando caminos. Antes, el centro comercial tenía plazas enormes y pasillos muy amplios por los que pasear entre la marabunta. Ahora han colocado pilas de cajas y cintas que cortan de forma bastante tonta los escenarios. Además, la eliminación del salto nos impide subirnos a los sitios para buscar nuevas rutas.
Resident Rising 4
Como dije hace unos párrafos, han introducido numerosos elementos de Resident Evil 4 en este juego. El más evidente es el cambio de cámara, ahora más cercana a los hombros de Frank, y el control con wiimando. El esquema de manejo es casi idéntico al de RE4 Wii Edition. Pero esto no es lo único que han añadido, de hecho el descaro es tan grande, que ahora podemos adquirir en el juego las mismas armas que había en el clásico de Capcom, como la pistola BlackTail, la Red 9, la escopeta antidisturbios, la Striker, los mismos rifles de francotirador... Más aún, las animaciones de recarga son exactamente las mismas que las de Leon S. Kennedy en sus aventuras por España. ¿Otro detalle? Los zombies ahora sueltan munición, comida y dinero. Estos objetos quedarán bien visibles gracias a un cilindro de luz rojo, verde o azul respectivamente que les sale alrededor. Igual que en otro juego que me suena mucho. Por otro lado, el menú de objetos en tiempo real ha desaparecido. Esa cinta donde podíamos llevar indistintamente armas de fuego, comida y armas de melé ha sido sustituido por un maletín de items en el menú de pausa... Muy parecido al de la saga Resident Evil.
Bien es cierto que estas inclusiones, aunque alarmantemente poco inspiradas, no son una mala idea. En Xbox 360 las armas de fuego eran tan inservibles que jamás las íbamos a usar, mientras que ahora son la salsa del juego. Frank puede llevar equipadas hasta cuatro armas de fuego a las que puede acceder rápidamente, más un arma de melé que podremos usar pulsando la A ó agitando el wiimando para asestar un duro impacto.

El problema viene en que se han preocupado tanto de añadir nuevas armas al juego que no se han preocupado de compensar la dificultad. La munición jamás será un problema, y las armas de fuego son abusivamente poderosas. Un certero disparo a la cabeza con la primera pistola que encontremos podrá volársela a la primera a cualquier zombie, y ya de escopetas ni hablemos, que pueden hacer lo mismo pero con varios a la vez. Esta enorme superioridad la podremos mantener durante todo el juego si compramos las últimas novedades de la tienda (uno de los añadidos más forzados y chirriantes del juego, sin duda). La última escopeta podrá arrasar un pasillo lleno de zombies de un único cartuchazo, por poner un ejemplo. Aunque irán apareciendo a lo largo del juego nuevos tipos de zombies que resistirán más disparos, no serán rival en absoluto para un jugador con un mínimo de habilidad y un armamento adecuado. Y si se diera la casualidad de que nos quedáramos sin munición, cosa muy rara, siempre nos quedaría el fiel cuchillo de caza o la katana, que siguen siendo verdaderamente temibles. Ah, y ahora tardan mucho más en romperse por el uso.