Javier Aranda

Nintendo anunciará la compra de SEGA para sorpresa de todos, y uno de los juegos de lanzamiento de NEScafé será un Mario vs Sonic de plataformas. Cuando pueda parecer que las sorpresas gordas se han acabado, aparecerá un vídeo de Cloud vs Sephirot y Square-Enix anunciará remakes de Final Fantasy VII, Final Fantasy VIII y Final Fantasy IX para Nintendo 3DS, que mejorarán los originales y tendrán muchos extras. Además de éstos, los remakes de Dragon Quest VII y Dragon Quest VIII para la portátil también se nombrarán.

Luego mostrarán las características de la nueva consola, Project Café que tendrá una potencia muy superior a PS3 y XBox 360 y utilizará una réplica del mando de Gamecube como control clásico, y tendrá también el Wiimote y el Cafémote adicionales, que tendrán pantalla táctil en el mando y muchos más sensores para poder hacer barbaridades.

Rafael Blasco      

En el caso de 3DS me encantaría que con la nueva actualización y la llegada de la e-Shop, Nintendo estableciese una estrategia online de calidad y acorde a los tiempos centrada en la creación de una gran comunidad. No obstante, lo que de verdad me tiene ilusionado es la idea de que la compañía de Iwata nos enseñe un título capaz de demostrar que las 3D no son un mero efecto visual, sino que puede eregirse como base de una nueva jugabilidad. Parece que Super Mario 3DS está llamado a cumplir ese papel, pero no le haría ascos a un nuevo título de Warioware, franquicia infravalorada que allí por donde pasa explota como nadie las posibilidades jugables de cada máquina.

Con Project Café quiero soñar. Quiero algo novedoso y fresco, que consiga hacer volar mi imaginación de jugón. Mi apuesta en este caso es por la realidad aumentada, que ahora se empieza a explotar en el mundo portátil, pero que en el mundo de las sobremesa podría tener su lugar. Las rumoreadas cámaras y pantallas en los mandos se me antojan con unas posibilidades brutales a la hora de interactuar con lo que estamos viendo en nuestras teles.

Y con Wii me daría con un canto en los dientes si se confirmasen todos esos títulos que no tenemos muy claro que vayan a salir de Japón como Pandora’s Tower, Rhythm Tengoku Wii o el remake de Fatal Frame 2. Si además Nintendo recuperase para los jugadores europeos y americanos esa enorme cantidad de juegos malditos que la tiranía de las divisiones regionales nos ha negado (Fatal Frame 4, Captain Rainbow, Zangeki non Rengileiv, Excibots, Trauma Team Hospital, por citar unos pocos) sería el jugador más feliz del mundo y Wii tendría una despedida a la altura de lo que se merece.