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Mario Kart 8

Una sensación de velocidad espectacular y una conducción diferente. Todo ha cambiado.

Mario Kart 8 - Análisis

Extra, extra, un Mario Kart socialmente conectado

Para mi lo más importante de un Mario Kart es competir así que agradezco enormemente todas las facilidades de este octavo juego. Se pueden crear comunidades en internet, públicas o privadas, en las que quedar con gente para jugar bajo unas características determinadas o te puedes meter a lo bruto en el juego en red. Ni faltan opciones ni sobran. [Actualizaremos este análisis con un comentario sobre la calidad de la conexión]

Al online se puede jugar hasta con dos personas por partida, como en Wii. Pero ahora la pantalla se divide en vertical y no en horizontal, algo que se agradece y que saca más provecho a las teles panorámicas. En local también se puede jugar entre tres o cuatro, todos en la tele. Aquí el Wii U Gamepad no aporta nada, como en el resto del juego excepto para usarlo como volante. Lo que se ha cargado el equipo de Konno es el modo batalla. Han cogido algunos circuitos normales y han puesto a la gente a dar vueltas como que para pegarse, pero son tan grandes que ni te ves. Eutanasia a una agonía que ya dura una década.

Para quien quiera exhibirse un poco está Mario Kart TV, un editor de vídeo para grabar los mejores momentos de cada partida y subirlos a YouTube. Es tan sencillo que se descontrola pero tiene un buen juego de cámaras para encontrar lo que se busca. También está conectado con Miiverse y hay sellos con los que dejar mensajitos majos en la red social de Nintendo. Bien.

A por Mario Kart 8

No sé si Mario Kart 8 va a ser el título con el que remonten las ventas de Wii U pero sí tengo totalmente comprobado que mis horas de juego diario se han multiplicado. Y si la tele está ocupada no importa porque trae esa maravilla que se llama Off-TV, que aquí se quita y se pone inmediatamente, con un dedo.

Mario Kart 8 es un juego bonito, pulido, completo, divertido y exigente, todo lo que tiene que ser un videojuego excelente. Y además tiene muchas más diferencias con las entregas anteriores de las que aparenta en un primer vistazo. Si tengo que buscar una pega real son esos tramos inertes que hay en varios circuitos, pero el conjunto de los trazados cumple de sobra con las exigencias. Por si fuera poco, está bien maquillado con unos buenos gráficos HD envueltos por un diseño exquisito.

Mi recomendación es que si tienes una Wii U te compres Mario Kart 8. Y si no la tienes, al menos piénsatelo porque esta vez sí, Nintendo lo ha vuelto a hacer.

Análisis Mario Kart 8 Wii U