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chick chick BOOM

Pequeño, sencillo, original, directo, divertido y alocado. A los sufridores pollitos de Chick Chick Boom WiiWare les sienta como un guante.

Chick Chick BOOM - Análisis

El catálogo de WiiWare poco a poco va tomando color con pequeños títulos que saben aprovechar los en principio escasos 40 megas disponibles para los juegos de la plataforma de descarga digital de Nintendo. Ya sea a través de un gran diseño de niveles, como se pudo ver en Robox, o mediante una jugabilidad diferente y frenética, como en Swords and Soldiers, lo cierto es que poco a poco se ha ido construyendo una identidad de lo que un título de WiiWare debe ofrecer.

Los chicos de Tons of Bits al parecer lo tienen muy claro. ¿Para qué intentar exprimir un motor gráfico que por mucho que nos esforcemos no sorprenderá en demasía cuando podemos, a través de un diseño resultón y una propuesta de juego práctica y cómoda, ofrecer una experiencia de juego que enganche y despierte el lado más competitivo del jugador ruin y despreciable que todos llevamos dentro?

Lo que Chick Chick Boom ofrece son batallas de dos grupos de pollitos, amarillos y negros, cada uno en su correspondiente corral, desde luego cuáles iremos lanzando diferentes ataques a nuestros adversarios. ¿Que cómo se juega? Muy sencillo: las batallas se realizarán por turnos de 25 segundos para cada equipo. En ese tiempo, podremos elegir entre tres ataques básicos con el que reducir la barra de vida de nuestro adversario (que irá disminuyendo en función de la cantidad de daño que hagamos a los pollitos rivales, y su consecuente muerte debido a estos daños). El primero de ellos será lanzarles una bomba, y su efecto es el más previsible: si un pollito está dentro del área de explosión, recibirá daño. El segundo ataque hará caer del cielo un objeto realmente pesado, véase un elefante, una televisión, una gran pesa o un sofá, y pobre del pollito que se encuentre debajo. El tercero es una planta carnívora que morderá a todos los pollitos que tenga a su alrededor.

Para lanzar cada ataque tendremos que dibujar con el puntero del mando de Wii su correspondiente forma dentro de los 25 segundos que tenemos disponibles. Cuanto más rápido la dibujemos, mayor será el poder de nuestro ataque, en una escala del 1 al 100. Si conseguimos que nuestro ataque cause más de 80 de daño, podremos mejorarlo a un nivel superior, el nivel verde. Si logramos que el ataque cause más de 90 de daño, desbloquearemos la mejora de ataque de color rojo. Los efectos de cada mejora son diferentes y bastante efectivos, si bien el que suscribe estas líneas no los desvelará para dejar que los jugadores los descubran por sí mismos. ¿Cómo elegir estas mejoras? Al terminar de dibujar la forma del ataque deseado, una diana empezará a dar vueltas de su dibujo, con un círculo verde en el centro, y si hemos desbloqueado el ataque rojo con un círculo rojo concéntrico dentro del verde aún más pequeño. Tendremos que disparar con atino a la diana para poder mejorar el ataque inicial.

De todas formas, no estaremos desvalidos ante los ataques del adversario. Para ello, podremos tanto pintar en nuestra zona para protegernos de sus ataques, como en la suya para evitar que se protejan de los nuestros. A través de algo tan sencillo como dibujar líneas pulsando A y apuntando con el mando a la pantalla podremos crear escudos contra los objetos pesados que caen del cielo, aislar a las bombas en un semicírculo para que no dañen a nuestros pollitos, o hacer que la planta carnívora trepe hacia lo alto de la pantalla, donde no alcance a ningún ave a la que morder, para que así muera de inanición.