Call of Duty: World at War

Call of Duty: World at War - Análisis

Ahora, acompáñeme, quiero enseñarle algunas de las imágenes de su campo de batalla. Bueno, ¿Qué le parecen? Sí, sí, lo sé. Ya sé que hace tiempo le enseñaron un vídeo en el que todo pintaba mucho mejor y más nítido, pero bueno, tampoco se ponga dramático. Yo he estado allí, en medio del conflicto y de las balas, y puedo decirle cómo se ve aquello. Cierto es que algunas de las texturas son horrendas, dignas de guerras acontecidas hace cinco o seis años, pero también es cierto que otras mantienen un nivel aceptable, pese a que inicialmente le cuesten cargarse un par de segundos para mostrar todo su esplendor. Por otro lado, y esto no me lo puede negar soldado, esta plataforma para la cuál luchamos nunca ha visto un conflicto con tantos elementos en pantalla y que desprenda tanta vida. Si se fija bien podrá ver gran cantidad de árboles, rocas, elementos destruibles como pequeños muros y cajas, así como un sin fin de partículas de ceniza en el aire, humaredas provocadas por las explosiones de las granadas y la artillería o destellos provenientes de las armas. Y aun así, espere a tener entre sus manos el lanzallamas. ¡Oh, soldado! Gran gozo y satisfacción sentirá al ver como esas llamaradas responden a sus movimientos de muñeca mientras provocan el caos en sus enemigos dejando un rastro de fuego y negro humo. Se podría decir, mi joven soldado, que podemos aceptar los fallos en las texturas y lo feos que son sus adversarios, también dignos de contiendas de hace un lustro, tan sólo por lo inmerso en la batalla que se va a sentir una vez esté dentro de ella.

Y es que esta guerra que lidiará en su Wii puede presumir de que, aunque no ha podido ser tan fielmente retratada como en otras plataformas, no ha tenido que renunciar a casi ninguno de los elementos que han hecho de las otras entregas unos enfrentamientos emocionantes, vibrantes y tan endiabladamente adictivos. Así, y pese a que no estamos muy acostumbrados por estos lugares, estaremos envueltos en una contienda donde todos hablarán perfectamente en castellano cuando el hilo argumental lo haga necesario. Algo que es de agradecer sobre todo por lo bien que ha sido llevado el doblaje. Aunque no contemos, como es lógico, con las voces de la versión americana, entre las cuáles encontramos a Gary Oldman (Drácula de Bram Stoker, El Quinto Elemento), o Keifer Sutherland (conocido por muchos por ser Jack Bauer en la serie 24).

¿Cómo dice soldado? ¿Qué usted prefiere las batallas en compañía? ¿Que el modo campaña no es para usted y que lo que quiere es curtirse en los "cara a cara" con soldados de todo el mundo? No hay problema. Ya sé que le habrán estado comentando que aquí, en nuestra humilde, blanca, y nintendera patria, las cosas las hacemos de un modo un tanto diferente al resto. Pero antes de echarse las manos a la cabeza déjeme explicarle. Primero empiece por crearse un perfil para poder jugar online. Recuerde que este perfil sólo será válido en su Wii, por lo que por desgracia, si quiere seguir combatiendo en casa de un amigo, va a tener o que llevarse su propia consola o hacerse un perfil nuevo. ¿Dónde está el problema? Pues que los méritos de guerra que haga aquí, en su querida patria-Wii, no serán reconocidos en patria ajena. En su país irá ascendiendo, con un arsenal envidiable y gran cantidad de habilidades desbloqueadas que lo convertirán en un combatiente formidable, pero cuando emigre a hacer la guerra a tierras extranjeras no tendrá ningún reconocimiento, comenzando desde un nivel de soldado raso.

Salvo este pequeño detalle déjeme decirle que disfrutará de sus enfrentamientos online soldado. Cierto es que no podrá acribillar a tantos enemigos como en otros lugares (tales como Medal of Honor: Heroes 2), pero definitivamente la experiencia que obtendrá en estos campos de batalla será absolutamente satisfactoria. Encontrará adversarios rápidamente, y en unos pocos segundos estará metido en materia fusil en mano. Podrá también personalizar clases a su gusto para adaptarse a la perfección a la situación y mapa en el que se encuentre. Así, tendrá la oportunidad de entrenarse tanto como un fusilero o repartiendo estopa ametralladora en mano en primera línea de combate, buscando contrincantes a diestro y siniestro, como también en el pellejo de un francotirador cómodamente apostado en una esquina del mapa.

Por último, y siguiendo con la instrucción de su entrenamiento online, soldado, he de recordarle que su colaboración con su equipo será generosamente compensada. Cada tres bajas consecutivas que consiga nuestro avión de reconocimiento desvelará la posición de los enemigos en el mapa; cuando realice cinco nos podrá avisar para machacar a sus escurridizos adversarios con nuestra artillería en cualquier punto del campo de batalla; para terminar, si es usted de los más duros y consigue llevarse por delante a 7 soldados enemigos sin haber mordido el polvo, mandaremos a nuestros perros para que infecten el mapa y mastiquen a aquellos insensatos que aun tengan el valor de tenerse en pie.

Bien soldado, creo que esto es todo. Ya le veo preparado para salir ahí fuera y hacerse una idea de lo que se va a encontrar. Puede que si hubiera elegido otro lugar donde combatir, hubiera encontrado más opciones online, o un nivel de detalle más extenso. Pero está donde está, y ciertamente, va a ser muy difícil que aquí vaya a encontrar una Segunda Guerra Mundial mejor y más completa. Lástima que no pueda gozar de las mejoras y ampliaciones que otras versiones han recibido, o que los mapas multijugador en ocasiones puedan parecer demasiado grandes para tan pocos contrincantes, pero le repito que esta experiencia le gustará. Merece la pena y no encontrará un conflicto más vibrante y más inmersivo hasta dentro de mucho tiempo.

Y ahora soldado ¡Mueva el culo! ¡Su ejército le necesita! ¡Sus compañeros están muriendo ahí fuera, y créame, aun quedan enemigos que están esperando a que les de la dosis de plomo y metralla que les toca!