¡Versus! Ronda 6: Futuro control de NX, ¿Algo al estilo Wiimote o Gamepad?
¡Continúa la lucha en Revogamers!
Sobrevivir a una pelea sobre Anouma y Zelda sin llegar a las manos tiene su mérito y en Revogamers lo hemos conseguido. Tanto las votaciones por Twitter como las del Foro dejan un resultado casi idéntico, con un 60% de votos apostando por la continuidad de Anouma al frente de la saga.
Para esta semana, nos imaginamos cómo debería ser el futuro control de Nx y vemos que en este tema tampoco nos ponemos de acuerdo, ya que Sergio apuesta por un control estilo Wiimote y Gorka apuesta por el Gamepad. ¿y tú, cual prefieres? Recuerda que puedes votar y dar tu opinión en el hilo del foro y votar por Twitter. Calienta los puños que esta pelea promete ser dura. Arranca el Versus #6.¡Fight!
Futuro control de NX: ¿Algo al estilo Wiimote o Gamepad?
Cuando Genyo Takeda trabajaba en el desarrollo de Wii fueron muchas las voces que acusaban a Nintendo de tomar un rumbo equivocado. Mientras el mercado se preocupaba por datos técnicos y potencia de las máquinas, el japonés comprendió que era un tipo de público al que jamás podrían satisfacer. La lección aprendida con Gamecube fue que daba igual el músculo que sacara la consola, pues esos usuarios inconformistas siempre querrían ir un paso más allá. El paralelismo con el mercado automovilístico les dio entonces la respuesta. Al igual que no todos los coches se construyen para competir en grandes competiciones, en la industria había un hueco para un modelo familiar con otras aspiraciones.
En ese contexto, el Wiimote se convirtió en la punta de lanza de su nueva consola, en el estandarte de una nueva forma de entender los videojuegos y la puerta de entrada a una nueva generación de jugadores. Su facilidad de manejo lo hizo accesible a personas que hasta entonces solo asociaban el videojuego a una etapa gris como producto marginal. Se trata del culmen de una buena idea que debido a su abaratado coste de fabricación -otra de sus virtudes- generó beneficios multimillonarios a la compañía. Tanto es así y considerando el parque de consolas instaladas en los hogares que quiso mantener el controlador en la presente generación, conviviendo de esta forma con el actual Gamepad.
Y en este punto es preciso preguntarse, ¿no es este tipo de ideas revolucionarias el golpe de efecto que Nintendo necesita con NX? El mando de Wii U fue, en cierta forma, un movimiento con el que la empresa quiso recular para no ser lo suficientemente rompedor de cara a las thirds party. A diferencia del Wiimote, su elevado coste encareció el precio de la consola y sus novedades parecían solo querer replicar el antiguo éxito de Nintendo DS. Con NX Nintendo tendrá que decidir si emprender su propio camino de forma definitiva o participar en la misma competición que Sony y Microsoft, pero no pueden admitirse medias tintas. La imagen de la empresa desde hace años se asocia a una experiencia diferente de juego que no existe en sus rivales y eso se traduce irremediablemente en una apuesta por la jugabilidad que aporte el control.
Con todo esto no quiero decir que deban mantener el Wiimote en sus próximos proyectos, sino más bien poner a trabajar al equipo de I+D con nuevas ideas alejadas de lo que ya existe en la actualidad como hiciera con Wii. No olvidemos que al igual que en su día fue la precursora de la cruceta y hoy es un elemento indispensable en el diseño de cualquier mando, aún existen muchas ideas por explorar y Nintendo es la única con hambre de cambio, de dar algo diferente a un sector que durante años se ha dejado llevar por la inercia y el conformismo.
El futuro de NX es una incógnita. Nintendo tendrá que hacer frente a asuntos tan destacados como su relación con las thirds party, el auge de la realidad virtual o la unión de sus departamentos de desarrollo portátil y sobremesa. Sin embargo, el más importante de todos es el mando que utilizará la máquina, pues será lo que defina su postura en la industria. Una elección valiente, única e inteligente a nivel empresarial como lo fue el Wiimote sentaría las bases de su nueva generación de consolas con gran acierto.