Portada » Artículos » Artículo » ¡Versus! Ronda 3: ¿Es Wii una buena consola?

¡Versus! Ronda 3: ¿Es Wii una buena consola?

Una lucha de más de 10 años.

Por mucho que estemos celebrando su décimo aniversario, nos toca ser objetivos con Wii y si echamos la vista atrás y tiramos de recuerdos la sensación es que le faltó mucho para poder considerarla una gran consola.

Es indudable el éxito que tuvo Wii y que hizo que mucha gente se incorporara al mundo de los videojuegos. Personas de mi entorno más cercano que siempre habían detestado las consolas de repente colocaban una Wii en su casa cual jarrón de IKEA y lo peor es que muchos le han dado más uso a ese jarrón que a la consola.

Porque no lo dudemos, Wii fue una moda, un éxito pasajero que, como hemos podido comprobar con WiiU no ha conseguido el efecto deseado sino más bien todo lo contrario, que los jugadores tradicionales se alejen de Nintendo.

Si miramos al catálogo, pues es cierto que existen grandísimas joyas, los Super Mario Galaxy o Donkey Kong Country Returns son sublimes o descubrimientos como Xenoblade Chronicles obras maestras, pero más allá de eso, pocos juegos más podemos recordar de la consola más allá del efecto aplastante de Wii Sports.

El Wii mote, por su parte, fue el auténtico alma de la consola consiguiendo grandes resultados para la mayoría de juegos pero, en otros, como el The Legend of Zelda Skyward Sword fue un auténtico sufrimiento personal, curioso para un rato pero insufrible en una partida larga.

Lo acabamos de comprobar en WiiU donde todo el mundo agradece que el The Legend of Zelda Twilight Princess HD ofrezca control “normal”. Una opción que debería haber existido en todos los grandes juegos de Wii, pero que incomprensiblemente nos obliga a jugar con sensor de movimiento de pies o haciendo aspavientos que en compañía eran divertidos pero que tu solo ante tu televisión se hacían ridículos.

Todos estos factores hicieron que abandonase a Wii mucho antes de lo deseado, quedando en el recuerdo los buenos momentos con la familia y amigos con los llamados juegos casual pero a decir verdad fueron pocos los juegos tradicionales que realmente disfruté que recuerde claramente, y eso por desgracia, no me pasa ni con la Super Nintendo, Nintendo 64 o Gamecube, consolas con mucho menos éxito comercial pero que si han dejado un poso muy positivo en mi recuerdo.

A todo ello hay que sumar la situación provocada con las Third Party, ya que el ir por detrás tecnológicamente y obligar a hacer usos específicos del mando provocó que muchos de los desarrollos que salían en la competencia no salieran en Wii lo cual fue el inicio de la ruptura casi total en WiiU.

Por todo, me queda un recuerdo bueno pero amargo tras estos 10 años. Con momentos muy buenos que me permitieron compartir mis gustos con mi entorno pero en lo que a videoconsola se refiere con demasiados puntos a mejorar para ser considerada una gran consola.