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Zombie Incident

A saltos con la horda de zombies.

Zombie Incident - Análisis

La eShop de Nintendo se va llenando de pequeñas joyas y este Zombie Incident es una de ellas. Coder Child coproduce junto con Nenefranz una aventura que recupera la magia de los 8 bits demostrando que el éxito de juegos como Shovel Knigth puede tener continuidad en nuestras 3DS.

El proyecto original se presentó a un concurso de desarrollo de juegos para MSX en 2011 y lo ganó con más de un 86 % de puntuación, enseñándonos que las buenas ideas funcionan sin importar el embalaje.

Y es que el planteamiento del juego es de lo más simple. Estamos en Hamartia, reino que ha sido invadido por unos extraños seres y tenemos que investigar en la piel de nuestra protagonista, Nana, lo sucedido, venciendo a los seres invasores y recuperando las 8 estrellas que nos devuelvan la paz.

Como vemos, un argumento trillado pero tampoco necesitamos nada especial porque el verdadero encanto del juego está en la capacidad de engancharnos hasta acabar con todos los enemigos.

Emulando a Mario

Y es que la mecánica más sencilla no podía ser: nos movemos con la cruceta y saltamos con el botón B.  Y Ya. Como los grandes de la época de 8 bits no necesitamos nada más para pasar un buen rato frente a la consola.

Acabamos con los enemigos saltando sobre ellos y dependiendo del color del enemigo en cuestión tenemos que darle más o menos veces. Parece simple pero nada más lejos de la realidad. Vamos llenando una barra de rayos hasta subir de nivel y con ello somos capaces de acabar con nuevos enemigos que en un principio son invencibles hasta que tenemos el nivel adecuado.

Esto nos obliga a volver atrás a aquellas pantallas que no pudimos superar por no tener el nivel suficiente y es que hasta que no acabamos con todos no nos dan el corazón para recuperar energía, lo cual se hace necesario ya que los niveles están planteados para que nos den muchas veces: varios enemigos en pequeños espacios que además amagan acercarse para hacernos equivocar y errar en el salto.

A su vez, tenemos que evitar los pinchos y el agua infectada que hay repartidos por el escenario y saltando para alcanzar las zonas más altas usando el doble salto con cuidado, ya que el scroll avanza y si no tenemos cuidado un salto en nuestra pantalla nos puede llevar a la de arriba y con la propia inercia del salto recibir un golpe enemigo.

Todo ello hace que no sea fácil avanzar y tendremos que repetir pantallas varias veces para conseguir pasarlas y sólo se nos permite guardar al conseguir entrar en las habitaciones donde se ocultan las estrellas, empezando de nuevo, eso sí, con los corazones que tuviéramos en ese momento.

Simpleza que engancha

El mapeado es un laberinto que se muestra en la táctil de nuestra 3DS y en el que cada pantalla nos muestra un color: verde si hay enemigos que podemos eliminar con nuestro nivel, rojo si hay un enemigo inmune a nuestros saltos y azul si ya está limpia la pantalla.

Todo un reto que se hace muy entretenido mientras nos dura, ya que pasarnos el juego no supera las 4-5 horas, pero teniendo en cuenta que su coste es 1,99€ sí que merece la pena la inversión.

La versión de 3DS respecto a la original de MSX cuenta con gráficos mejorados y sobre todo le sientan de maravilla las 3 dimensiones, resaltando las plataformas sobre los fondos. Además, contamos con rankings online con los que intentar superar los records de otros usuarios o amigos, lo que incita a volverlo a jugar para superarnos. Mención aparte merece la música, que es de las que no podemos dejar de tararear en nuestra cabeza una vez dejamos de jugar.

En definitiva, un pequeño gran juego que te enamorará mientras dura. Su mayor virtud es su mayor defecto, ya que la simplicidad que nos engancha es lo que le lastra el colocarse como uno de los grandes descargables de la consola.