SteamWorld Dig
Sé una "máquina" excavando.
Steam World Dig: A Fistful of Dirt (Wii U) - Análisis
Tras su paso por la eShop de Nintendo 3DS, por fin llega a nuestras Wii U SteamWorld Dig: A Fistful of Dirt. Con él, el estudio sueco Image & Form Games nos presenta un plataformas con una fusión de western y robots que nos introducirá en el mundo de la minería como jamás lo habíamos hecho. Además, el juego se beneficia de una suerte de cross-buy, con una rebaja del 25% en la versión de Wii U si ya adquiriste la de Nintendo 3DS.
Antes de empezar a desgranar el juego, es necesario indicar que puede ser jugado tanto con el Gamepad de Wii U como con el Wii U Pro Controller. También se beneficia de la función Off-TV, con la que podremos jugar desde nuestro Gamepad sin necesidad de la televisión. Ni el Wiimote, ni el Nunchuk son compatibles con el juego.
En SteamWorld Dig acompañamos a Rusty, un robot que llega a la ciudad para recibir una herencia. La dote resulta ser una enorme mina que debemos explorar para descubrir los grandes secretos que encierra. Cojamos nuestro pico y nuestra linterna porque la aventura está a punto de comenzar.
La mecánica del juego es clara. Mientras examinamos la cueva, iremos descubriendo objetos y habilidades que harán de Rusty un robot muy poderoso. Para mejorar nuestros poderes y objetos debemos recolectar minerales, que además servirán para que acudan más ciudadanos al pequeño y humilde pueblo de Tumbleton. Estos nuevos inquilinos nos ayudarán con nuevas mejoras para nuestro equipo y nos contarán historias sobre lo que se oculta debajo del pueblo y su pasado. Cabe destacar que la versión de Wii U, al contrario que la versión de 3DS, viene completamente en castellano y muy bien adaptado, con lo cual a los que no dominamos bien el idioma anglosajón nos vendrá de perlas para sumergirnos en la aventura.
Como hemos dicho antes, la mecánica del juego es clara pero no por ello sencilla. Todos los cambios que hagamos dentro de la mina son permanentes, es decir, si eliminas tierra de una zona no volverá a aparecer. Por ello los túneles deben hacerse de una manera estratégica ya sea para recoger minerales como para volver a la superficie, una de las cosas más importantes del juego ya que, aparte de que es la única forma de guardar la partida, contamos con una linterna de una duración muy limitada que solo puede ser recargada con luz solar. Además, los espacios de nuestra mochila son muy limitados por lo que necesitaremos vender nuestros minerales a menudo.
A todo eso hay que sumarle que, cada vez que morimos, perderemos la mitad del dinero que llevamos encima. Esto no sería un problema de no ser porque los minerales con los que obtenemos nuestras ganancias son limitados dentro del juego. Si morimos muchas veces o no hacemos buenos túneles y nos dejamos muchos minerales sin poder coger, no podremos comprar todas las mejoras en la tienda con lo cual, si te gusta ser un perfeccionista y completar los juegos al 100%, no podrás hacerlo en esa partida.
Excavar en la mina puede ser repetitivo pero todo lo que hemos comentado anteriormente hace que el yacimiento se convierta en un enorme puzle. Además, conforme nos adentramos en ella aparecerán nuevos enemigos, cambiará el entorno y se introducirán nuevas mecánicas. A veces, cuando obtenemos algunas habilidades, debemos volver sobre nuestros pasos para desbloquear algunos misterios.
La duración y la rejugabilidad son las dos grandes sombras del juego. La duración (incluso completándolo al 100%) no supera las 6 horas. Además, el juego nos deja con pocas cosas que hacer una vez acabado. Solamente terminar de comprar las mejoras si no lo has hecho con anterioridad, cosa poco útil una vez concluida la historia.
Por último, tenemos que hacer una mención especial al apartado técnico del juego. SteamWorld Dig es una auténtica obra maestra a nivel visual. La ambientación western combinada con cyberpunk es más que sobresaliente. La mina, el pueblo, los enemigos, los ciudadanos, las animaciones, absolutamente todo el juego desprende arte. La banda sonora del juego también es muy amena y, sin duda, nos ayudará a introducirnos más dentro del este magnífico mundo.
En definitiva, SteamWorld Dig es un juego muy bueno artísticamente hablando que quizás llega un poco tarde a Wii U y que no alberga cambios significativos respecto a su versión de Nintendo 3DS, salvo por el idioma. Puede parecer monótono, pero se suple perfectamente gracias a su gran calidad y encanto. Pese a que es corto y no muy rejugable, ofrece a los jugadores una experiencia única digna de ser jugada. ¡Coged vuestra pica y vuestra linterna y aventuraos a este maravilloso mundo subterráneo!