Spectrobes: OrÃgenes
La amenaza Krawl se ha extendido por los confines más recónditos del universo y sólo Rallen y Jeena podrán erradicar este peligro una vez más, esta vez lejos, muy lejos de su sistema natal, Nanairo.
Spectrobes: OrÃgenes - Análisis
Para hacernos con ellos tendremos que utilizar a un Spectrobe en su forma infantil, que rastreando a nuestro alrededor encontrará objetos y también fósiles. Estos fósiles tendremos que extraerlos a través de una especie de minijuego de arqueología, en el cuál tendremos que ir destruyendo con mucho cuidado un bloque de tierra con diferentes utensilios para obtener finalmente limpio el fósil. Según hagamos el minijuego, el estado del fósil será mejor o peor, y por lo tanto la criatura que de él salga será más o menos poderosa. El fortalecimiento podrá hacerse de diversas maneras. Podemos hacer que suban de nivel, ya sea haciendo combatir a las formas adultas, ya sea utilizando a las formas infantiles para que busquen recursos. Si no queremos usarlos, siempre podemos alimentarlos con cristales de experiencia que hallaremos a lo largo de la aventura, en las cajas que tendremos en nuestro inventario donde podremos interactuar con ellos. Por su parte, tanto Rallen como Jeena dispondrán de su propio armamento en el cuál dispondremos desde espadas, lanzas, y hachas, hasta armas de disparo e inclusive guantes reforzados para golpear con los puños. Cada uno con su propio sistema de combos y su propia efectividad contra distintos monstruos. Lo suficientemente completo en este aspecto.
A nivel gráfico hay que decir que desde Genki se ha realizado una labor notable. Las localizaciones están muy bien detalladas y diferenciadas las unas de las otras, mostrándonos desde bosques, cuevas, pantanos y, en definitiva, el clásico elenco de lugares que se identifican con un elemento en el cuál se inspiran las criaturas que en ellos encontramos. En general, el nivel de las texturas y los efectos de luces están bastante altos, sobre todo teniendo en cuenta que los entornos que tendremos que explorar en la mayoría de ocasiones serán extensos, con una distancia de horizonte bastante lejana, y todo ello sin resentirse casi nunca la tasa de frames por segundo. Por su parte los modelados tanto de los personajes, como de los Spectrobes y los krawl rozan un nivel muy bueno, si bien es cierto que el diseño de los enemigos puede pecar en ocasiones de repetitivo, cambiando a veces sólo el color para mostrar su afinidad a cierto elemento. En definitiva, un apartado gráfico digno y a la altura al cuál sólo se le puede achacar cierta simpleza en el diseño y que, curiosamente, las escenas de video se resienten respecto al resto del apartado gráfico en general.
A nivel sonoro tampoco hay ninguna pega. Melodías suaves para los diferentes pueblos y lugares de exploración que se irán alternando con otras más épicas reservadas para los momentos de combate o tensión. Pero lo más importante de este apartado es el completo doblaje al castellano que se ha hecho del título. Si bien no pasará a la historia por se uno de los mejores trabajos en este ámbito dentro de los videojuegos, siempre es de agradecer que un título de estas características venga de forma totalmente íntegra en el idioma de Cervantes, voces incluidas.
Al final, pocas son las pegas que se le pueden sacar a este juego. Efectivamente a la larga se hace algo repetitivo tener que hacer el minijuego de excavar para descubrir un nuevo Spectrobe o un nuevo objeto para nuestras criaturas. La trama principal no es nada del otro mundo, y la habremos visto mil veces en otros RPG: un enemigo de turno malo malísimo, un pueblo oprimido, y unos héroes que van de localización en localización para terminar con esta amenaza. Quizás el mayor problema de este Spectrobes: Orígenes es que debido a que está basado en una serie infantil, a la mayoría de jugadores tradicionales del género les parecerá que mientras que la historia no termina nunca de tener demasiada chicha, los combates que son lo más entretenido acaban siendo demasiado fáciles y carentes de reto.
Pese a todo, estamos ante un título notable, absolutamente recomendado tanto para aquellos que nunca han jugado a uno, como para los que sepan apreciar un juego bien hecho, completo y que no ofrezca demasiadas complicaciones.