Dr. Mario Miracle Cure
Mario y Luigi se ponen la bata de médico para eliminar virus en Nintendo 3DS.
Dr. Mario Miracle Cure - Análisis
Dr. Mario Miracle Cure es la nueva entrega del fontanero de siempre - pero en uno de sus otros trabajos, erradicando virus, - siendo así la primera entrega desarrollada expresamente para Nintendo 3DS, trayéndose consigo lo visto en sus lanzamientos de la eShop de Wii U y WiiWare, añadiendo alguna mecánica nueva y, sobre todo, teniendo su factor puzle-adictivo de siempre.
El puzle de siempre ahora tiene niveles a completar
Dr Mario Miracle Cure sigue la estela de su serie en general, es decir, es una especie de puzle tipo Tetris en el que hay que juntar en línea vertical u horizontal cuatro piezas o más de un color para que desaparezcan, siendo lo realmente interesante que una de esas piezas que se junten en esa recta sea un virus de dicho color para que pueda ser eliminado, que es el principal objetivo. Las piezas que caen vienen en grupos de dos formando una cápsula médica, que bien puede ser de un mismo color o cada mitad de uno distinto. Se van consiguiendo puntos conforme se va jugando, y el Game Over aparece si llega un momento en el que somos incapaces de eliminar colores y llenamos el escenario hasta arriba de cápsulas.
Hay tres formas de jugar dentro de este título: Dr. Mario, Dr. Luigi y Bactericida. El primero de ellos es el clásico ya explicado. La variante del hermano de verde se basa en cambiar cómo caen las piezas, ya que ahora caen en grupos de cuatro formando una L, por lo que hay que pensar mucho más y la cosa se va complicando mucho antes de lo esperado. Por último, en Bactericida lo que hay que hacer es coger la consola como un libro y usar el lápiz para colocar las cápsulas de piezas donde deseemos (existe la opción de jugar en modo zurdos).
Pero lo bueno de este nuevo Dr Mario está en los modos. En Sin Receta puede jugar al estilo de siempre, simplemente por echar un rato y buscar la mayor puntuación ya sea solos o contra la CPU en duelos en los que las hazañas de uno se convierten en obstáculos para el otro. En Bactericida además se puede elegir la dificultad y velocidad inicial con la que empezar a jugar, para que así no haya que empezar desde algo muy sencillo para buscar el desafío que se adapte a nuestro nivel.
La gran novedad está en el uso de súper cápsulas, que en el modo anterior pueden activarse/desactivarse en Dr. Mario y Dr. Luigi, las cuales son power- ups que aparecen cuando una barra especial situada a la derecha del escenario se llena. Hay varias y aparecen al azar, con efectos tales como eliminar todo lo que este en la misma vertical de donde se sitúen o eliminar todo lo que sea de cierto color que se encuentre cerca.
Todo lo que hay en Sin Receta, salvo Bactericida, ya sea con o sin súper cápsulas está disponible en multijugador off-line con un amigo que tenga el juego (o que no lo tenga gracias al modo descarga) o bien online, donde hay tablas de clasificación también. El lag es mínimo, por lo que lo más importante de jugar con alguien cumple de sobra. Por último, Laboratorio Especial es un modo fases, en el que hay sesenta a superar, siempre siguiendo unas condiciones concretas en la variante del juego que corresponda. Esto también sirve para colocar un pequeño tutorial que nos ayuda a comprender todas las mecánicas, súper cápsulas y estrategias para dominar el título a fondo.
En definitiva, Dr. Mario Miracle Cure sigue con la tradición y añade algo nuevo, haciendo que estas novedades no sean obligatorias para tampoco entorpecer al jugador que busque lo de siempre. A pesar de que la clásica opción de elegir la música se ha perdido, todo luce bien, y sin llegar a destacar técnicamente – porque no lo necesita – cumple de sobra con lo que se puede esperar de él. El 3D sólo puede activarse en los menús, y la curva de dificultad está muy bien planteada, sobre todo gracias a la inclusión del Laboratorio Especial.