Nintendo cerró 2014 como número 1 de software de Francia

Nintendo sigue teniendo en Francia un país aliado. Terminó el 2014 como número uno de Japón en ventas de software, conseguida sobre todo gracias al mercado portátil, y con una lucha abierta en sobremesa por la segunda plaza. 

De los 20 juegos más demandados del país, 8 fueron publicados por Nintendo, por tanto, exclusivos para sus consolas. En los doce meses ha colocado más de 4,5 millones de copias que le sirven para ser el editor número 1 de software, y ya van dos años seguidos. Le siguen en la lista Electronic Arts y Ubisoft.

El número uno se lo quedó Pokémon Rubí Omega/Zafiro Alfa con casi medio millón de copias alcanzadas, pero le siguió muy de cerca el gran éxito centroeuropeo, Tomodachi Life. Como en Alemania, el simulador social se ha convertido en un referente para niños y niñas y sigue vendiendo aun fuera del periodo navideño. El otro de la portátil con buenos números ha sido Super Smash Bros. 3DS, aunque no ha llegado a las 300.000.

Para el 2015, el presidente de Nintendo apuesta sobre todo por Monster Hunter 4 Ultimate. Ha revelado que la saga viene vendiendo unas 100.000 unidades por plataforma, pero esta vez no quieren conformarse con esa cantidad. Y sin salir del 13 de febrero, atención a lo que pueda conseguir The Legend of Zelda: Majora´s Mask 3D porque el hardware de la edición limitada ya está agotado por todo el país.

La pequeña espina se la ha clavado Wii U, que se ha quedado algo lejos del objetivo marcado para este 2014. Las ventas del hardware de sobremesa crecieron un 40% respecto al año anterior; fueron 240.000 consolas más que le sirven para llegar a las 515.000 acumuladas desde su lanzamiento. Su mayor exponente fue Mario Kart 8, que está ya en 350.000 unidades.

Esas cifras la relegan a la tercera posición anual, aunque en el total sigue por delante de Xbox One por una 100.000 consolas. Ninguna de las dos hace sombra a PS4, que tras una primera Navidad lenta casi llegó al millón solo en 2014. De la que no hay datos es de la portátil, que serviría para ver cómo se han llevado al hardware esos éxitos en software.