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Project X Zone

Project X Zone es el crossover definitivo hecho juego.

Análisis de Project X Zone - Análisis

Project X Zone me ha roto todos los esquemas. En primer lugar, por llegar a salir en occidente. Estamos ante uno de esos casos en que un título sale para quedar bien con los aficionados, y no tanto porque se vaya a ganar dinero con él. En segundo lugar, porque su apuesta es tan original y tan curiosa, que es complicado no sentirte mínimamente interesado en su propuesta, independientemente si te interesa el género de rol. Puede que nunca lo juegues, que jamás forme parte de tu juegoteca, pero lo que es indudable es que merece, por lo menos, unos minutos de tu atención.

Hablamos de un título que eleva a su máxima expresión el significado de la palabra crossover, el coger a personajes de sagas diferentes y `arrejuntarlos´ a ver lo que pasa. En Nintendo el ejemplo más claro que hay es el de Super Smash Bros., uno de los totum revolutum mejor montados de la industria. Pero Project X Zone va un paso más allá y es capaz de colocar en un mismo título una decena de franquicias diferentes provenientes de Capcom, Namco y SEGA, además de unos cuantos personajes de cosecha propia, que hacen un poco de hilo conductor.

Análisis de Project X Zone 

La locura y el batiburrillo de personajes que hay en este título supera todo lo imaginable y, de verdad, nunca se había visto nada igual. Chun-Li, de Street Fighter, es la pareja de la súcubo Morrigan (¡Ay, Morrigan!), de Darkstalkers; a su lado, Ruy y Ken, que no hay forma de separarles; Jill Valentine y Chris Redfield, de Resident Evil, también están ahí, repartiendo estopa, así como Megaman y Zero, ayudados por Sir Arthur, de Ghost & Goblins. El semidemonio Dante, de Devil May Cry, hace buenas migas con Demitri, el vampiro de Darkstalkers. Fran West, de Dead Rising le hace fotos eróticas (Perfect Erotica) a todos los personajes femeninos que aparecen. Akira y Pai Chan, de Virtua Fighter aportan su granito de arena con sus puñetazos y patadas, al igual que la pareja formada por Xiaoyu y Jin Kazama, de Tekken, con los que además hay guiños para el Street Fighter vs. Tekken. También los protagonistas de Resonance of Fate, el RPG de SEGA, los de Tales of Vesperia y Tales of the Abyss, Shining Force EXA, Dynamite Cop, Zombie Revenge, Fighting Vipers, .hack, Super Robot Wars, Sakura Wars, God Eater, Adventure of Valkyrie, Endless Frontier… La lista te deja sin aliento.

El único protagonista es la historia, que trata de poner en situación al jugador de por qué todos estos personajes están juntos. El Emisario Subespacial parece un panfleto a su lado. Mundos que se entremezclan y colisionan, viajes en el tiempo, enemigos misteriosos y centenares de batallas es lo que espera al jugador que se decida a darle una oportunidad a este peculiar JRPG táctico.

Preparaos a leer mucho. Estamos ante un juego de rol japonés, y eso significa entender las cosas y que te las expliquen con palabras. Además, con tal cantidad de personajes todos deben tener su propia voz y meter baza. Los diálogos son dinámicos y muy divertidos. La historia no hay forma de tomársela en serio, pero incluso ella sabe de sobra que no es más que un pretexto para ver a todos estos personajes y todas estas sagas juntas en un mismo cartucho.

Project X Zone no es un juego rápido y lleno de acción. Es un título que requiere de cierto ritmo. La parte tranquila de historia es para disfrutar tanto como del sistema de combate, que tampoco es manco. Divertíos con los chistes, con las apariciones inesperadas y con los giros de guión estrafalarios. Todo está clavado con alfileres, ¡pero qué más da!

Por cierto, si os perdéis entre tanta saga y tanto nombre, no os preocupéis. Hay una completísima enciclopedia dentro de juego, que se irá desbloqueando a medida que vayamos encontrando a los distintos personajes. Sirve también para poner en antecedentes ante sagas menos conocidas en occidente. Un detallazo.